El Río de San Diego
LOS HÁBITATS Y LA CONSERVACIÓN
Mission Valley es hogar del hermoso río de San Diego; naciendo en las montañas de Cuyamaca, el río de San Diego serpentea hacia el oeste, donde desemboca en el océano Pacífico. El río atraviesa por una variedad de tipos de hábitats de gran valor ecológico y sirve como una fuente vital de agua para la innumerable flora y fauna, crucial para la biodiversidad de nuestra región.
COMUNIDADES DE PLANTAS NATIVAS EN SDSU MISSION VALLEY
Matorral costero de San Diego
Esta comunidad de matorral costero es la más extensa en el sur de California. La comunidad está compuesta predominantemente por arbustos con hojas caducifolias por sequía como la artemisa de california, la maderista, la salvia blanca, el lentisco y la salvia negra.
Matorral de sauce del sur
Esta comunidad de matorral suele estar compuesta de un denso matorral ribereño de hoja ancha y caducifolia en invierno, dominada por varias especies de sauces y ocasionalmente dispersa con álamo de Fremont y aliso. Esta comunidad puede encontrarse en estos sitios cerca de las salidas de drenaje pluvial.
Bosque ribereño de álamos y sauces del sur
Este tipo de bosques consiste, generalmente, de bosques altos de hoja ancha, que son caducifolios en invierno. Esta comunidad es dominada normalmente por álamos, con varios sauces arbóreos, así como sauces arbustivos que dominan el sotobosque. Las plantas en esta comunidad requieren de suelos minerales húmedos y están localizados cerca de ríos y arroyos.
Bosque ribereño del sur
Este tipo de bosque es generalmente dominado por alisos y álamos; esta comunidad se encuentra a lo largo de arroyos y ríos.
¡EL DÍA QUE SE SALVÓ EL RÍO DE SAN DIEGO!
El valle río de San Diego es una llanura aluvial natural que ha creado desafíos para los granjeros y desarrolladores desde que llegaron las primeras personas a establecer asentamientos permanentes aquí. Después de la Segunda Guerra Mundial, Mission Valley pasó de ser tierra de cultivo a convertirse en un centro empresarial, residencial y hotelero, lo que incrementó el impacto negativo de las inundaciones frecuentes.
A principios de la década de los 60, el Cuerpo de Ingenieros del Ejército de los Estados Unidos elaboró planes atenuantes de inundación que proponían transformar el río de San Diego a un canal de concreto similar al río de Los Ángeles. Durante la primera reunión comunitaria para discutir un plan de gestión de inundaciones en 1961, la comunidad de San Diego se opuso a la idea de un canal de concreto— expresando que se fragmentarían hábitats, se destruirían zonas ribereñas y evitaría el abastecimiento de aguas subterráneas; aun así, el Cuerpo de Ingenieros del Ejército continuó refinando planes para la canalización durante varios años.
En 1971, se llevó a cabo una audiencia pública de suma importancia, durante la cual, de los 1000 asistentes, la mayoría se opuso al canal de concreto. Como resultado, el proyecto fue finalmente reexaminado y los planes para construir el canal de concreto se detuvieron ¡el río de San Diego fue salvado!
En 1982, el ayuntamiento aprobó el Primer Proyecto de Mejoramiento del río de San Diego (FSDRIP por sus siglas en inglés); una colaboración entre arquitectos paisajistas, biólogos, agencias públicas e ingenieros; se pronuncia: fizz-drip, por sus siglas en inglés. FSDRIP creó un canal de concreto con un fondo natural y paredes elevadas, carreteras elevadas propensas a inundarse y añadió nuevos espacios abiertos a lo largo del río. FSDRIP, junto con otros proyectos de restauración y protección del río, ha reducido y controlado las inundaciones alrededor del río y al mismo tiempo restaura hábitats y crea espacios para que las personas disfruten del río.
La historia del río de San Diego muestra 200 años de desafíos a su integridad ecológica e hidráulica. Al reducir las áreas impermeables en este sitio y añadiendo 80 acres de espacios abiertos, SDSU Mission Valley continúa con el legado de mejoras positivas a lo largo del río de San Diego.